Chequea tu auto antes de salir
Antes de enfrentarte a la lluvia, dale un vistazo rápido a tu coche:
- Limpiaparabrisas: Si notas que no limpian bien o dejan rayas, es hora de cambiarlos.
- Luces: Asegúrate de que todas funcionan para que puedas ver bien y también ser visto.
- Llantas: Revisa que no estén muy gastadas y que tengan la presión correcta. Unas llantas en mal estado son un peligro en pavimento mojado.
Baja un poco la velocidad
Cuando llueve, las llantas pierden tracción y frenar puede tomar más tiempo. Manejar más despacio no solo te da más control, sino que también te ayuda a reaccionar mejor si algo inesperado sucede.
Dale espacio a los demás
La distancia es clave. Con la lluvia, el frenado es más lento, así que déjale espacio al auto de adelante.
Usa las luces adecuadas
- Con lluvias ligeras, las luces bajas son ideales para que veas y te vean.
- Evita las luces altas, porque pueden reflejarse en las gotas de lluvia y empeorar tu visión.
- Si está lloviendo a mares y apenas ves, las luces antiniebla pueden ser una buena opción.
Cuidado con el hidroplaneo
El famoso hidroplaneo pasa cuando las llantas “flotan” sobre una capa de agua, perdiendo contacto con el suelo. Para evitarlo:
- Maneja más despacio, sobre todo en charcos.
- No hagas giros bruscos ni frenes de golpe.
- Si te pasa, suelta el acelerador y dirige el volante suavemente. Nada de pánico.
Mantén la calma si derrapas
Si pierdes el control del auto, no te asustes. Gira el volante con suavidad hacia la dirección del derrape y evita frenar de golpe. La clave es mantener la calma.
Cero distracciones
Cuando llueve, necesitas toda tu atención en la carretera. Guarda el teléfono, ajusta la música antes de salir y mantén las dos manos en el volante.
Planifica tu ruta
Checa el pronóstico antes de salir y trata de evitar zonas que se inunden. Si la lluvia está muy fuerte, considera esperar un rato antes de salir.
Evita los charcos grandes
Nunca sabes qué hay debajo de un charco. Puede ser un hoyo o algo que dañe tu auto. Si no tienes otra opción, pasa despacio y sin acelerar de golpe.
Ten un kit de emergencia
Siempre es buena idea llevar un botiquín, una linterna, cables para pasar corriente y una cobija. No sabes cuándo podrías necesitarlos.
Conducir bajo la lluvia no tiene que ser una experiencia estresante si tomas las precauciones adecuadas. Mantén tu coche en buen estado, maneja con calma y presta atención a lo que pasa a tu alrededor.